ePrivacy and GPDR Cookie Consent management by TermsFeed Privacy Generator

Home / Artículos

¿Cómo se puede tratar el vértigo producido por la Esclerosis Múltiple?

“Mareos” es en realidad un término que engloba una serie de sensaciones molestas, que tienen que ver con un cierto estado de confusión

12 Jun 2021

“Mareos” es en realidad un término que engloba una serie de sensaciones molestas, que tienen que ver con un cierto estado de confusión y que pueden incluir:

  • Pérdida del equilibrio
  • Desorientación
  • Aturdimiento

Los mareos pueden tener su origen en la fatiga, en una bajada de la presión arterial o de los niveles de azúcar en la sangre, o también ser un efecto secundario de algún medicamento, entre otras posibles causas.

Tanto el vértigo como los mareos están asociados a un mayor riesgo de lesiones producidas por caídas accidentales, y por ese motivo es importante abordarlos y controlarlos adecuadamente.

En el vértigo, los pacientes tienen una alteración muy específica: la intensa percepción de que todo gira a su alrededor. El vértigo puede estar causado por lesiones: áreas dañadas en las complejas rutas que coordinan la información visual y espacial –entre otras- que el cerebro requiere para producir y mantener una sensación de orientación y equilibrio.

El vértigo puede considerarse una forma más severa de los mareos, que puede desembocar en problemas para mantener el equilibrio y afectar a la visión. Se trata de un síntoma con capacidad para afectar considerablemente la calidad de vida de las personas con esclerosis múltiple, tanto por las dificultades que plantea en el desempeño de tareas cotidianas en el contexto del hogar como por sus potenciales efectos en la vida laboral de los pacientes.

Síntomas asociados al vértigo

  • Problemas para mantener el equilibrio
  • Problemas de movilidad
  • Náuseas y vómitos

El primer paso para tratar el vértigo es que un médico determine su causa para elegir la mejor terapia posible.

Un episodio súbito de vértigo puede ser un indicador de que se está produciendo un brote de esclerosis múltiple, de modo que es importante que el paciente se ponga en contacto con su equipo médico para que decidan si un curso corto de corticoides podría ayudar a atenuarlo.

Existen muchas opciones diferentes para tratar el vértigo, pero es crucial asegurarse de que el problema que lo está causando sea tratado de forma eficaz.

Tratamiento

  • Los síntomas asociados al vértigo pueden ser tratados con el apoyo de un fisioterapeuta, que puede ayudar a determinar qué posiciones específicas los desencadenan y a trabajar con el paciente para diseñar estrategias que los combatan con un programa de ejercicios personalizado. En algunos pacientes con vértigo, los síntomas se presentan cuando la persona se recuesta. La fisioterapia puede mejorar el equilibrio y la coordinación, y el ejercicio físico puede ayudar a reducir tanto los mareos como el vértigo. El fisioterapeuta puede diseñar un plan de actividad física adecuado a las necesidades de cada paciente.
  • Por otra parte, un terapeuta ocupacional está capacitado para recomendar métodos que vengan a reforzar la seguridad del paciente cuando se presenta el vértigo. Estas estrategias pueden incluir la retirada de elementos en su entorno para reducir el riesgo de caídas o golpes, así como la instalación de apoyos en localizaciones específicas en las que el riesgo puede ser mayor.
  • Otra posibilidad es recurrir a medicamentos que se administran por vía oral para reducir los síntomas de vértigo:
  • Fármacos de la familia de los antihistamínicos- La dosis más habitual es de 25-50 mg a intervalos de 8 horas, según los casos. Pueden provocar efectos secundarios como sequedad de boca, estreñimiento o visión borrosa.
  • Benzodiacepinas
  • Medicamentos en parches.
  • En casos particularmente severos, en los cuales el vértigo se presenta con vómitos, es posible que los medicamentos por vía oral no sean una opción viable. El equipo médico puede sopesar la conveniencia de recurrir a corticoides administrados directamente al riego sanguíneo, así como fluidos para compensar la deshidratación que provocan los vómitos. Los corticoides ofrecerían la ventaja de combatir la inflamación del sistema nervioso que hace que se presenten los síntomas de esclerosis múltiple.